Solo quedan cuatro jornadas por el final de temporada y todo está por decidir. El Girona, en plazas de play-off, recibirá este lunes la visita de un rival directo, el Tenerife, con el objetivo de conseguir tres puntos que le permitan consolidarse. Los canarios, por su parte, son cuartos con un punto más y llegarán a la cita en un momento de forma excelente después de haber sumado once de los últimos quince puntos que han disputado. La semana pasada ya se impusieron a domicilio, en este caso en el campo del Lugo (0-2) y, de hecho, los de Luis Miguel Ramis son nada menos que el mejor visitante de la categoría.
Ramis dirige por segundo curso consecutivo al equipo canario. El preparador tarraconense, que llegó a la mitad de la anterior y logró revertir la mala dinámica, ha dotado a su conjunto de una identidad propia basada en la solidez, la fortaleza detrás y la claridad de ideas a la hora de jugar que le han permitido volver a luchar por cotas altas después de varias temporadas transitando por media tabla. Unas premisas que se ven reflejadas también en las estadísticas, y es que con sólo 31 goles encajados se han convertido en el equipo menos goleado hasta el momento, y han subido hasta los 51 goles a favor pese a haber perdido a Fran Sol en verano. El gol, que el pasado año estuvo capitalizado precisamente por su delantero referencia, este año está mucho más repartido y lidera la tabla de anotadores Elady Zorrilla con once, seguido por el catalán Enric Gallego con diez. También han tenido una participación destacada Shashoua (6) y Mario González (5), unas estadísticas que ponen de manifiesto la importancia de la segunda línea en el equipo.
Girona y Tenerife se han encontrado en hasta dieciocho ocasiones desde 2008 con un balance favorable a los rojiblancos de siete victorias y seis empates, por tan sólo cinco derrotas. Y si en el Heliodoro Rodríguez López el dominio ha sido históricamente local, en Montilivi también, y es que los de Míchel han ganado cinco de las nueve veces que han recibido a los blanquiazules y tan sólo han dejado de puntuar en uno. En la primera vuelta, eso sí, un gol de Baena no fue suficiente y el encuentro se decantó para los tinerfeños con dos tantos de Mellot y Gallego en el tramo final.
